¿Cómo determinar las necesidades de agua de una planta?
Regar las plantas es un paso esencial para garantizar su cultivo y mantenimiento. Comprender sus necesidades ayuda a evitar el
exceso de riego o el estrés hídrico. Sin embargo, muchas personas se preguntan diariamente: ¿cuánta agua necesita una planta?
¿Con qué frecuencia se debe regar? La respuesta más común suele ser: «depende». Es cierto, pero carece de precisión. Por lo
tanto, intentemos responder a esta pregunta de manera concreta en este artículo.
Definición
Las necesidades de agua dependen de dos factores: la cantidad y la frecuencia del riego. Las necesidades de una planta no son
constantes, evolucionan a lo largo de su ciclo de vida. En cuanto al riego, podemos distinguir tres etapas principales:
- Germinación: fase crítica de establecimiento en la que la planta necesita un suelo constantemente húmedo.
- Planta joven: fase en la que las necesidades de agua aumentan progresivamente hasta la etapa adulta.
- Adulta: fase en la que las necesidades de agua se estabilizan hasta la cosecha o la muerte de la planta.
Necesidades de agua durante la germinación
Durante la etapa de germinación, es importante mantener el suelo ligeramente húmedo de manera constante, sin saturarlo de
agua. Dos métodos para lograrlo:
Con pulverizador: Ideal para pequeñas cantidades de semillas. La humidificación superficial en un metro cuadrado consume aproximadamente 0,1 litros de agua. Por lo tanto, requiere un riego muy frecuente: cada dos días en promedio.
Por capilaridad: Ideal para reducir la frecuencia de humidificación, el agua asciende hacia las raíces desde un depósito.
Con pulverizador: Ideal para pequeñas cantidades de semillas. La humidificación superficial en un metro cuadrado consume aproximadamente 0,1 litros de agua. Por lo tanto, requiere un riego muy frecuente: cada dos días en promedio.
Por capilaridad: Ideal para reducir la frecuencia de humidificación, el agua asciende hacia las raíces desde un depósito.
Necesidades de agua de la planta joven
Entre el final de la germinación y la etapa adulta, las necesidades de agua aumentan progresivamente. El riego se realizará al
cuello, en la base de la planta, preferiblemente por la mañana. Se puede estimar la necesidad de la planta aplicando un
porcentaje de las necesidades de una planta adulta, aumentando según la edad de la planta. Por ejemplo, un tomate alcanza la
edad adulta a los 70 días: a los 35 días, necesitará el 50 % de la cantidad de agua de un tomate adulto. Por el contrario, la
frecuencia del riego disminuye con la edad de la planta.
Necesidades de agua en la etapa adulta
Es a partir de la etapa adulta cuando las necesidades de agua se calculan realmente.
Primero, se puede clasificar la planta en una de las siguientes categorías según su necesidad de agua:
Para calcular las necesidades individuales de una planta (y no por metro cuadrado), se divide la cantidad de agua por el número de plantas que pueden ocupar un metro cuadrado.
Ejemplo: una planta de tomate pertenece a la categoría de plantas con necesidad media-alta de agua, por lo que 20 L / m² cada 7 días. Cada planta ocupa 0,5 metros cuadrados porque su separación es de 50 cm x 100 cm. Por lo tanto, se pueden tener 1 / (0.5 * 1) = 2 plantas / m². La cantidad de agua que necesita una sola planta de tomate es: 20 / 2 = 10 litros.
Primero, se puede clasificar la planta en una de las siguientes categorías según su necesidad de agua:
- Baja: 7,5 litros / m².
- Moderada: 15 litros / m².
- Media-alta: 20 litros / m².
- Alta: 25 litros / m².
Para calcular las necesidades individuales de una planta (y no por metro cuadrado), se divide la cantidad de agua por el número de plantas que pueden ocupar un metro cuadrado.
Ejemplo: una planta de tomate pertenece a la categoría de plantas con necesidad media-alta de agua, por lo que 20 L / m² cada 7 días. Cada planta ocupa 0,5 metros cuadrados porque su separación es de 50 cm x 100 cm. Por lo tanto, se pueden tener 1 / (0.5 * 1) = 2 plantas / m². La cantidad de agua que necesita una sola planta de tomate es: 20 / 2 = 10 litros.
Conclusión
En resumen, comprender las necesidades de agua de una planta implica ajustar la cantidad y la frecuencia de riego según su
etapa de desarrollo, teniendo en cuenta tanto las condiciones teóricas (ideales) como las ambientales.
=> En el próximo artículo, veremos cómo estos parámetros exteriores influyen en el riego.
=> Puede consultar las necesidades teóricas de más de 200 especies vegetales en nuestro wiki.
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